En la publicidad tradicional el único indicador que se solía medir para ver que tan bien había ido una campaña publicitaria era la venta neta.

Los más minuciosos evaluaban el aumento de personas promedio en el establecimiento, o las llamadas que recibían (si es que colocaban un teléfono de contacto en su anuncio).

Hoy en día con el cambio del comportamiento del comprador, y su preferencia cada vez mayor a usar las tiendas en línea para adquirir sus productos o solicitar servicios. Las reglas son similares, pero tenemos una mayor amplitud de indicadores clave que nos permiten medir en qué parte de nuestro embudo de venta deberíamos realizar ajustes.

Los KPI o indicadores claves de progreso en los que podríamos fijarnos, depende de la herramienta publicitaria o de análisis del sitio web que utilicemos son:

  1. Datos demográficos. Corresponde a la edad, sexo, ubicación geográfica de las personas interesadas en nuestros anuncios. Estos datos nos permitirán optimizar los mismos, haciendo correcciones para adaptarlos a los grupos que más interés demuestren en nuestro sitio o marca.
  2. Porcentaje de rebote. Si tienes configurado correctamente la analítica del sitio web podrás ver un porcentaje de personas que entran al sitio web, pero no realizan otra acción como dar click a un enlace o botón. Aunque parezca injusto este indicador mide que tan bien has configurado tu embudo de ventas.
  3. Sesiones orgánicas. Se refiere a los visitantes que llegan producto de buscadores como Google, Bing, etc. Una sesión es el tiempo que un usuario se mantiene interactuando en nuestro sitio web. Un usuario puede abrir varias pestañas de nuestro sitio web, por esa razón siempre va a ser mayor el número de sesiones que el de usuarios. Esto es como las visitas a un negocio.
  4. Páginas / Sesión. Corresponde a la cantidad de páginas que un usuario visitó por sesión. Nos permite entender que tanto interés nuestro sitio web está generando en la audiencia.
  5. Duración media de la sesión. Es el promedio de permanencia de un usuario en nuestra web. Siempre es bueno analizar el promedio de tiempo, ya que obtenemos una visión realista de lo que está sucediendo. También nos permite medir la lealtad de nuestros usuarios y qué estrategia podemos aplicar para mejorar ese indicador.
  6. Páginas de destino o páginas más visitadas. Corresponde a aquellas páginas que más tráfico orgánico atraen a nuestro sitio web.
  7. Velocidad de carga del sitio web. Este es un indicador al que debes prestarle mucha atención. El equivalente en los negocios físicos es la rapidez de atención a los clientes que nos visitan. Cuando un sitio web carga muy lento las personas se van (y no vuelven). Para mejorar y evaluar esto, puedes visitar Google Page Speed Insights.

Hay muchos otros indicadores que se pueden analizar, lo importante es que antes, durante y después de una campaña no esperes simplemente que se concreten las ventas. Internet nos da la facultad de prever, anticipar e incluso corregir en la marcha cualquier situación que impida conseguir los objetivos de una campaña.

Comparte esta web